Así es la cosa. Seguimos siendo indios incivilizados para estos hijos de puta que piensan que son dueños del mundo.
Malditos ellos que no saben de realismo mágico ni de traucos escondidos en las noches de Chiloé. Malditos ellos que no conocen de diablos que danzan en el desierto ni de vírgenes que recorren los bosques y atraviesan los lagos.
Malditos ellos que nos vienen a dar demostraciones de una democracia profundamente racista y excluyente, que sólo respeta su diversidad, que sólo incluye a los que ellos incluyen.
Ojala Chile no juegue el domingo, no se lo merecen ellos; ellos que son unos malditos.
(Una y media de la mañana, después de escuchar radio Bío-Bío, de ver todos los noticiarios posibles, de darle vuelta y vuelta a la red para ver que se podía averiguar)
Malditos ellos que no saben de realismo mágico ni de traucos escondidos en las noches de Chiloé. Malditos ellos que no conocen de diablos que danzan en el desierto ni de vírgenes que recorren los bosques y atraviesan los lagos.
Malditos ellos que nos vienen a dar demostraciones de una democracia profundamente racista y excluyente, que sólo respeta su diversidad, que sólo incluye a los que ellos incluyen.
Ojala Chile no juegue el domingo, no se lo merecen ellos; ellos que son unos malditos.
(Una y media de la mañana, después de escuchar radio Bío-Bío, de ver todos los noticiarios posibles, de darle vuelta y vuelta a la red para ver que se podía averiguar)
No hay comentarios:
Publicar un comentario